Estudiantes de cinco establecimientos educacionales de la Diócesis de Osorno se reunieron en dependencias del Colegio San José para festejar la venida del Espíritu Santo, donde compartieron momentos de recreación, de compartir y de oración.

La música y el canto, estuvo a cargo del coro de la parroquia nuestra Señora de la Candelaria de la comuna de San Pablo, y de la capilla Santa Clara de Rahue Alto, con lo que los jóvenes aplaudieron y cantaron, dando paso a un espacio de encuentro personal con el Señor.

En la ocasión, en que además los estudiantes vieron un par de videos motivacionales, también estuvo presente el obispo Jorge concha Cayuqueo, quien saludó a los presentes, a las profesoras a las integrantes de la pastoral y “de mi parte mi humilde acción de gracias por estar aquí, porque siempre hay alguien que nos mueve, y más allá de las personas, es Jesús, a Él es a quien seguimos”.

“Él es nuestro Señor, nuestro Maestro y nuestro Dios, y si creemos en Él, también creemos en lo que dijo: que iba a enviar al Espíritu Santo, Él lo prometió, y aseguró que ese Espíritu nos iba a enseñar, a acompañar, a defender e iba a estar con nosotros. El Espíritu Santo ya vino, ya llegó de una vez y para siempre, pero necesitamos estar acogiéndolo siempre también y hoy estamos aquí festejando esta promesa cumplida”, agregó.

Añadió el obispo Jorge que el “Espíritu viene a darnos fuerza, nos anima, nos da entusiasmo, nos da luz, podemos contar siempre con Él. Por eso no nos olvidemos nunca de hacer una oración simple, pero siempre pedirle al Espíritu Santo para que venga en nuestra ayuda. Esta es la oportunidad de reavivar eso, y de tenerlo siempre presente, de contar con el Espíritu porque creemos en Jesús y en su Palabra”.

En esta Vigilia de Pentecostés, organizada por la red de Colegios Católicos de la Diócesis de Osorno, estuvieron presentes la pastoral juvenil de cinco establecimientos educacionales: San Mateo, Santa Marta, Santa Cecilia, Preciosa Sangre y el colegio San José, además de los párrocos:  de la parroquia San Leopoldo Mandic, Felipe Fernández y de nuestra Señora de Lourdes; padre Juan Delau.

También cabe destacar la presencia de las religiosas Hijas de San José Protectoras de la Infancia, como anfitrionas del encuentro; y las hermanas de Santa Marta y de la Preciosa Sangre, quienes también se hicieron parte activa y participativa de cada uno de los momentos vividos por los jóvenes.