Este día, en que la Iglesia hace memoria de San Juan María Vianney, el llamado Santo Cura de Ars, después de la proclamación del Evangelio, el pastor de la Iglesia Osornina se dirigió a los presbíteros y religiosos presentes: “hermanos quiero animarlos a perseverar en la vida espiritual, en cuyo centro esté el Señor, a quien todos nosotros quisimos seguir un día, y a quien ustedes se entregaron con generosidad”.

“No se olviden nunca de dar siempre gracias a Dios, porque aún con todas las dificultades, lo necesitamos siempre. El Evangelio nos dice: ´sin Él, no podemos hacer nada´”, señaló don Jorge, y recordó las palabras del Papa Francisco en su discurso al Simposio “Por una Teología Fundamental del Sacerdocio”, que realizó el 17 de febrero del 2022.

En aquella oportunidad el Pontífice habló de las cuatro “cercanías”, dijo el obispo, y detalló: “la cercanía con Dios, la cercanía con el obispo, la cercanía entre los sacerdotes y la cercanía con el Pueblo de Dios. Sin estas cercanías el sacerdote es solo un obrero cansado, decía el Papa”, añadió el obispo.

Luego de desarrollar cada una de dichas “cercanías”, el Pastor de la Iglesia osornina instó a los sacerdotes, a mantenerlas siempre presentes “en nuestra vida sacerdotal. La cercanía con Dios es lo primero, y lo que nos recuerda el Evangelio de hoy es para todos los discípulos, y nosotros también lo somos, discípulos y seguidores del Señor”.

“Sin mí, no pueden hacer nada, la cercanía con el Señor es siempre la posibilidad de vivir más fecundamente, mejor, con alegría nuestra vocación. San Juan María Vianney, a quien estamos recordando, en esta misma línea dice: ´la Gracia de Dios nos ayuda a caminar y nos sostiene, es tan necesaria como las muletas a un lisiado´”, explicó don Jorge.

Invitó a demás a que “nos dejemos animar queridos hermanos a vivir lo mejor posible nuestra vocación”.