El inicio del canto de entrada dio paso a la procesión por la nave central del templo, donde el Administrador Diocesano, padre Cristian Cárdenas Aguilar; el presbítero Bernardo Werth y los sacerdotes del Verbo Divino, Juan Delau y Pablo Wevo ingresaron hasta el presbiterio para presidir y concelebrar la eucaristía.

También estuvieron presentes, el diácono Juan Carlos Mardones, quien ejerció su servicio ministerial en el Altar y los acólitos de la comunidad anfitriona quienes apoyaron con su misión durante la celebración eucarística. Por su parte la asamblea acompañó con el canto y la oración en cada momento.

En la oportunidad, antes de compartir su reflexión, el padre Cristian entregó el saludo que el obispo electo de la Diócesis de Osorno, Monseñor Carlos Godoy, envió a la comunidad diocesana con motivo de la celebración de la fiesta patronal dedicada a San Mateo, “deseándonos a cada uno el don de la bendición, un abrazo fraterno, con el deseo que próximamente, sabemos que, a partir del 11 de noviembre, estaremos caminando juntos”.

Inmediatamente después, el Administrador Diocesano de la Iglesia osornina inició su homilía y dijo que “cuando celebramos al apóstol San Mateo, nosotros en nuestra diócesis debemos vincularlo a la historia de nuestra ciudad porque va muy de la mano la parroquia San Mateo a la ciudad de Osorno que se iniciaba en aquél entonces”.

Destacó que el mismo Señor, “de la mano de cada uno de nosotros iba conduciendo nuestra vida, y en el conducir de esta vida, la Palabra de Dios viene en este día especialmente a través de la primera lectura (Ef 4, 1-7. 11-13), a invitarnos a una actitud de vida, a invitarnos a descubrir en cada uno de nosotros que está sembrada la vocación. Vocación que responde al llamado de Dios, para seguirlo, para estar con Él, para conocerlo”.

“El apóstol seguía diciendo que esta comunidad que formamos es un solo cuerpo, y que en ese cuerpo habita la gracia del Espíritu, y que la fuerza del Espíritu es la que nos mueve a cada uno, en primer lugar, a reconocer la presencia del Padre a lo largo de nuestra historia, la historia de nuestra ciudad, la historia de nuestra Iglesia, pero también la historia personal de cada uno, donde el Señor se hace presente por la gracia del Espíritu”, resaltó.

Añadió que además este mismo texto, “nos hacía mención que este don del Espíritu Santo, nos comunica según lo que necesitamos, y nos comunica un don especial para que en medio de la sociedad seamos apóstoles, profetas, predicadores del Evangelio, para que seamos pastores, maestros, sigue el apóstol diciendo: y así el Señor organizó su Iglesia, la edificó en el Cuerpo de Cristo en la unidad de la fe y del conocimiento de su Hijo, Jesús”.

Agregó que todo esto que dice la primera lectura, no solamente es para que los creyentes lo mantengan como conocimiento, sino que es para que “en nuestra historia, en nuestra vida, podamos descubrir a qué nos llama el Señor”, y aseguró que también invita a cada uno a ser profetas, “que, en medio de nuestro tiempo, seamos capaces de alzar la voz para colocar la presencia de Dios delante de los otros y en medio de la sociedad. Que las situaciones, o lo acontecimientos de la vida y del mundo no silencien la Palabra de Dios”.

Antes de la bendición final, el Administrador Diocesano junto al presbítero Bernardo, a los dos sacerdotes del Verbo Divino, al diácono, a los acólitos y a la asamblea presente, hicieron la oración del Santo Patrono del templo Catedral y de la Diócesis de Osorno.

La fiesta a San Mateo Apóstol terminó alegremente con un momento fraterno en los salones parroquiales.