Este servicio generoso que las personas realizan con quienes se encuentran enfermos en sus casas, hospitales y clínicas de nuestra provincia “es una hermosa vocación que apoya a los fieles que no pueden asistir a los templos para recibir al Señor en la Eucaristía, por lo tanto, es una gran fuerza que tiene nuestra Iglesia y que nos ayuda también en esta Pastoral de la Salud”.

Así lo aseguró su asesor, el padre Francisco Triviño, quien agregó que “hoy no asistió el 100 por ciento de los ministros extraordinarios de la Comunión de nuestra Diócesis de Osorno, pero poco a poco vamos a ir sumando a los hermanos ausentes en este primer encuentro que realizamos, después de casi dos años sin reunirnos”.

Estos espacios de formación y de compartir, se llevarán a cabo “cada dos meses, siempre el tercer sábado. Invitamos a nuestros hermanos sacerdotes a que motiven a los ministros extraordinario de la Comunión de sus parroquias y comunidades, a que se sumen a nuestros encuentros para poder trabajar conjuntamente esta pastoral del Área de la Salud”, agregó el sacerdote, Vicario Parroquial de la parroquia Jesús Obrero.

“Esta es una de las áreas con la que trabajamos, pero como les explicamos a quienes asistieron, nuestra Pastoral es mucho más amplia, donde tenemos que apuntar nuestra vida cristiana de fe, no solamente en los enfermos sino también en los familiares, en los adultos mayores, personas con discapacidad, entre otros”, aseguró el padre.